La terapia de un terapeuta holístico es capaz de abordar el ámbito de la psicología y la salud de una manera integradora y completa, concibiendo al individuo como un conjunto de partes, que solo trabajando de forma sincrónica y conciliadora, pueden facilitar un buen estado de salud.
En realidad, después de muchos años de investigación en los que se ha intentado comprender la psicología humana, a partir de la descomposición de sus partes, los terapeutas holísticos pretendemos ayudar desde una perspectiva plena y natural.
Y es que, un estado de satisfacción mental y felicidad recurrente, es capaz de actuar a nivel endocrino en cada uno de nuestros sistemas y células, permitiendo mantener de forma sincrónica la salud y el bienestar. Cuando somos felices, hormonas como la serotonina actúan a diversos niveles del organismo, produciendo la relajación muscular, facilitando los procesos digestivos, el control del sistema cardiovascular, etc.
Sin embargo, lejos de lo que hace años se consideraba, nuestro cuerpo no está compuesto por partes que trabajan de forma aislada, en los que una hormona o una acción repercute sobre una única diana. Ahora, sabemos que la salud es un concepto global, y en el que están involucrados múltiples sistemas.
Así, los terapeutas holísticos desarrollan un concepto diferente, en el que la faceta física, mental, emocional, espiritual y energética, cobran protagonismo para garantizar el estado de bienestar. Y es que, en un diagnóstico fidedigno, es especialmente importante detectar a tiempo cualquier problema de conexión, que pueda tener lugar entre todas estas partes componentes.
Por ello, si necesitas más información sobre esta disciplina o quieres conocer mi biografía y credenciales profesionales como terapeuta holístico, te invito a que visites esta página.
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